Crónica e imágenes del Viaje Guiado por el románico de Sigüenza y su comarca, el 29/10/11
El sexto viaje guiado que ha organizado Arteguias en el año 2011 tuvo como protagonista el norte de la provincia de Guadalajara, con la ciudad episcopal de Sigüenza como eje principal.
La ciudad seguntina está ligada a la sede episcopal que ya tuvo en tiempos remotos y que recuperó tras la reconquista cristiana a los musulmanes a comienzos del siglo XII. Es por esta causa que sus dos grandes monumentos son su imponente castillo que sirvió de residencia a los obispos y la propia catedral de Santa María.
Nuestra primera visita fue precisamente al castillo, en la parte alta de la ciudad. La enorme mole de murallas almenadas sobrecoge por su altura y grandiosidad. En el patio de armas pudimos comprobar la adecuación recibida para acondicionar la fortaleza como Parador Nacional.
A partir del castillo, toda nuestra ruta fue cuesta abajo y nos permitió callejear por el casco histórico de la urbe, avistando lugares con tanta historia como la Puerta del Hierro de la muralla, la Casa del Doncel, la Plaza de la Cárcel, etc.
Hicimos una pausada visita a la iglesia románica de San Vicente, muy relacionada con la catedral por su arquitectura hispano-languedociana.
Camino de la catedral, también dedicamos unos minutos a contemplar la gran puerta de la antigua iglesia de Santiago.
En el sorprendente y poco conocido Museo Diocesano de Sigüenza nos esperaba su amable encargada Mabel que nos explicó su enorme colección de piezas medievales, renacentistas, etc. Este museo ha sabido conservar obras de arte de todo el episcopado, muchas de ellas pertenecientes a aldeas abandonadas. Aquí pudimos contemplar arcos mudéjares, una excelente colección de imaginería mariana románica y gótica, un extraordinario Calvario del siglo XIV, una pila bautismal y puerta románicas, etc.
En nuestro apretado horario, la siguiente visita fue el interior de la catedral. No sólo analizamos la arquitectura románica, protogótica y gótica de sus muros, pilares y bóvedas, sino que visitamos lugares tan emblemáticos como la Capilla del Doncel con su afamado sepulcro del siglo XV, la Sacristía de las Cabezas o su enorme claustro gótico.
En el Restaurante El Motor nos esperaba una rica comida y un ameno rato para descansar del intenso paseo por las calles y monumentos seguntinos.
El autocar nos recogió enfrente de dicho restaurante para adentrarnos por el alfoz de Sigüenza, muy poco poblado y con algunas aldeas pequeñísimas pero encantadoras. La estrecha y sinuosa carretera que conduce a Jodra del Pinar (veinte habitantes) termina bajo la pequeña iglesia parroquial románica. Comprobamos que los talleres extranjeros e innovadores de la catedral apenas influyeron en la arquitectura religiosa rural. En efecto, la iglesia de San Juan Bautista es el típico edificio tardorrománico de una pequeña nave, ábside semicilíndrico, pequeña galería porticada y buena puerta de arquivoltas sobre columnas.
No mucho más lejos nos esperaba la iglesia de la Asunción de Saúca, con su preciosa galería porticada de pandas perpendiculares, con sus capiteles vegetales e historiados. Nos entretuvimos en analizar su iconografía, aunque algunas de sus esculturas -como la de la Balaam y su burra- nos llenaron de dudas y misterios, algo que también forma parte de la "salsa" del románico...