Crónica e imágenes del Viaje Guiado por Tres Villas medievales de Segovia, el 19/11/11
El último de los viajes guiados programados por Arteguías para el año 2011 tuvo como escenario el occidente provincial segoviano, concretamente las antiguas Comunidades de Villa y Tierra medievales de Ayllón, Maderuelo y Fresno de Cantaespino. Se trataba de un viaje especialmente esperado por todos ya que, meses antes, hubo de posponerse debido a la excesiva demora en las obras de restauración, adecuación y apertura al público de la que estaba llamada a ser una de las joyas de la corona de la jornada: la ermita de la Vera Cruz de Maderuelo.
Así pues, puntuales a la cita como siempre, la expedición partió de la Plaza de Castilla en dirección norte, sirviendo el primer tramo de camino, como es tradicional, para una primera contextualización histórica y artística de los monumentos a visitar.
La primera sorpresa de la jornada nos la deparó el Túnel de Somosierra; y es que la densa niebla y la persistente lluvia que nos acompañó durante el tramo madrileño del recorrido, se convirtió en una luminosa y soleada mañana una vez entramos en tierras segovianas, permitiéndonos contemplar desde el autobús inigualables panoramas otoñales del Sistema Central.
Tras la parada de rigor para desayunar, para la cual se eligió la preciosa Plaza Mayor de la Villa de Riaza, el primer monumento que visitamos fue la iglesia parroquial de la cercana localidad de Santa María de Riaza; una pequeña población bastante familiar para todos por encontrarse junto a la carretera de Soria pero cuyo templo, de enorme interés, es una de las joyas del patrimonio segoviano más desconocidas.
En Santa María, pese al armónico aspecto exterior de la iglesia, dotada de una sobria galería porticada, el principal interés de todos se centró en su interior, del cual puede afirmarse, sin exagerar, que se trata de un auténtico museo para el deleite de cualquier amante del arte medieval: una soberbia pila bautismal, un espectacular artesonado, varias tallas relevantes y unas populares pero encantadoras pinturas sobre tabla de gran antigüedad dispuestas hoy en la cabecera, hicieron las delicias de todos los presentes.
A continuación, desde Santa María de Riaza, nos dirigimos a la modesta localidad de Languilla, una de tantas poblaciones del entorno que han sabido conservar su templo románico pero que, a diferencia de otras esconde, tras una galería porticada semi-cegada, una de las portadas más interesantes de todo el románico segoviano. La portada de Languilla causó auténtica sensación entre los presentes por la riqueza plástica y narrativa de sus capiteles, sirviendo, además de para poner en práctica nuestros conocimientos de iconografía, para elaborar distintas teorías e interpretaciones sobre varias misteriosas escenas allí esculpidas.
Tras visitar Languilla, en menos de diez minutos llegamos a Ayllón, sin duda, uno de los puntos clave de la jornada al tratarse de una de las villas más influyentes del entorno durante los siglos del románico, siendo varios los monumentos de este periodo allí conservados.
Muy cerca del lugar habilitado para el estacionamiento del autobús, visitamos en primer lugar los restos de la antigua iglesia de San Nicolás, hoy utilizada como cementerio de la localidad y que conserva una bonita portada románica. A continuación, tras un breve y agradable paseo por las estrechas callejas de la localidad, llegamos a su fotogénica plaza principal, en la que pudimos admirar las armoniosas proporciones y la riqueza escultórica del ábside de la iglesia de San Miguel, hoy sin culto.
Muy cerca, en la iglesia de Santa María la Mayor, pese a tratarse de una construcción dieciochesca, los asistentes pudimos descubrir, empotradas en sus muros, diversas piezas románicas reaprovechadas de alguna construcción anterior, destacando por encima de todo uno de los escasos crismones existentes en el románico segoviano.
Como magnífico colofón al recorrido por la villa ayllonesa, la antigua iglesia de San Juan causó sensación entre los visitantes ya que, al tratarse de una vivienda particular, suele pasar desapercibida para muchos visitantes. En ella, su amabilísimo propietario Pedro nos acompañó en la visita, compartiendo con nosotros sus peripecias y el enorme esfuerzo que le supuso rehabilitar el templo desde un montón de escombros hasta lo que puede apreciarse en la actualidad. Todo un monumento al buen gusto y al amor al arte del que todos, amantes del románico, salimos fantaseando sobre la inigualable experiencia que debía suponer disfrutar de una agradable tarde de verano al cobijo de tan insignes muros.
Tras una agradable comida en uno de los restaurantes de Ayllón, nos dirigimos al que estaba llamado a ser el punto culminante de la visita: la ermita de la Vera Cruz de Maderuelo, la cual, no defraudó, ya que en su interior, y de una manera muy acertada, han sido reproducidas las pinturas románicas cuyos originales fueron trasladados hace varias décadas al Museo del Prado de Madrid por el riesgo que corrían al construirse en su entorno un gran embalse.
Llama la atención como en el modesto interior de la Vera Cruz pueden adivinarse aún las viejas improntas de las pinturas originales a un lado; y las nuevas pero preciosas reproducciones al otro, sirviéndonos éstas a todos los asistentes para conocer diversos aspectos técnicos y, sobre todo, iconográficos de la pintura románica que, debido a los escasos restos conservados, se trata de una de las disciplinas artísticas más desconocidas del arte románico.
Aún maravillados por la riqueza plástica de los frescos de la Vera Cruz, nos dirigimos al casco histórico de la villa de Maderuelo, donde acompañados por Blanca, responsable de turismo de la localidad, pudimos, además de recorrer sus encantadoras callejuelas, visitar las iglesias de Santa María y San Miguel, ambas de origen románico.
Así pues, una vez la oscuridad fue echándose encima y tras un reconfortante café, emprendimos camino de regreso a Madrid, donde llegamos dentro del horario previsto y donde, tras desearnos felices fiestas y próspero año nuevo, nos citamos para la próxima visita guiada, que tendrá lugar a comienzos del 2012.