Guía monumental (arte e historia) de Fraga, Huesca
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Huesca | ||
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Introducción a la guía de arte (monumentos y rutas) de Fraga, Huesca
Se cree que el origen de Fraga puede ser romano, aunque aparece por primera vez nombrada en tiempos árabes.
Fue asediada por Alfonso el Batallador donde sufrió una severa derrota pocas semanas antes de morir. Fue en 1149 cuando definitivamente Fraga pasa a manos de los ejércitos cristianos de Aragón.
Fraga cuenta con un rico patrimonio monumental. Gracias a su pronta reconquista a mediados del siglo XII cuenta con varios edificios medievales de interés.
Pero con todo, el monumento fundamental de Huesca es su iglesia parroquial de San Pedro.
Ábside y torre de la iglesia de San Pedro
La iglesia de San Pedro, recientemente restaurada, es el monumento más destacable de Fraga. Se construyó sobre el solar que ocupaba la mezquita mayor.
La obra cristiana debió iniciarse a finales del siglo XII o comienzos del XIII. De esa época conserva la planta románica, la cabecera, la portada y parte de la torre.
El monumental ábside es de semitambor, con un
ventanal de arco con fino baquetón sobre columnillas. La portada
es excelente, donde destaca una extraordinaria colección de
capiteles historiados. Por último, el primer cuerpo del campanario
es románico, y los dos siguientes, góticos, como se
comprueba por la morfología de sus ventanales. Los cuerpos
superiores son más modernos y menos interesantes.
En el interior, se aprecian inmediatamente las múltiples reformas
del siglo XVI, especialmente el recrecimiento que experimentó
la iglesia y sus suntuosas bóvedas de crucería estrelladas
con nervios espinazo, arcos terceletes y combados.
Portada
La
portada románica del muro sur es muy sencilla, con sólo
dos arquivoltas. Afortunadamente, a falta de columnas, las jambas
están encapiteladas con frisos escultóricos de gran
belleza.
Aunque cronológicamente deben fecharse en pleno siglo XIII,
estilísticamente mantienen un contenido naturalismo y hasta
cierto hieratismo románico en algunas de las figuras.
Las escenas representadas son la Tentación de Cristo, El Seno de Abraham, y dos escenas de combate contra el diablo, una protagonizada por San Miguel y otra por San Gabriel.
Uno de los aspectos más interesantes de estas escenas es el de las diversas morfologías con el que se representa al diablo: dragón con escamas, alas y cola rematada en cabecita; animal con aspecto de cabra y prominentes cuernos; otro con cabeza de dragón pero cuerpo de cuadrúpedo y alas; y por último otro con extraña cabeza cornuda (¿lobo?) y también alado.
No queda duda de que estamos antes un conjunto escultórico con fines didácticos donde se adoctrina sobre el combate entre el bien y el mal y su postrera derrota.
Otros monumentos y rutas de Fraga
La iglesia de San Miguel, situada en el antiguo castillo tiene restos de estructuras románicas y góticas.
A poca distancia de Fraga, en dirección al norte, encontramos el yacimiento romano de Villa Fortunatus, villa bajoimperial de los siglos II al IV de. C, lugar de donde proceden algunos de los mosaicos más valioso que guarda el Museo Arqueológico de Zaragoza.
Tenía estructura abierta a un gran patio, un peristilo rectangular desde el que se accedía a las distintas dependencias y habitaciones.
Se pavimentó con mosaicos. En el patio, había un aquarium, decorado con frescos de tema marino. También disponía de termas y calefacción subterránea.