Guía del Monasterio de Sanfins de Friestas, Portugal
El conjunto monumental de Sanfins de Friestas se encuentra en el extremo norte de Portugal, a muy poca distancia al sur del río Miño, a pocos kilómetros de Valença do Miño y también de Tui, ya en territorio español.
La actual iglesia románica, muy bien conservada como a continuación veremos, fue el templo de un monasterio benedictino fundado probablemente a finales del siglo XI.
La primera referencia documental que tenemos de este cenobio es de tiempos de la última condesa de Portugal, Doña Teresa (1112-1128), madre del primer rey portugués Alfonso Enríquez.
Hay que recordar que aunque la franja de territorio entre los ríos Miño y Lima perteneció desde el siglo XII al reino independiente de Portugal, eclesiásticamente dependía del Obispado de Tui.
Esta circunstancia no fue modificada hasta el año 1381 cuando Roma permitió que este territorio tuviera una administración independiente, centrada en la Colegiata de Valença. Ya en 1513, la región entre el Miño y el Lima va a ser anexionada por el Papa León X definitivamente al Obispado de Braga.
Pero en los siglos XII y XIII, a pesar de
que las dos riberas del Miño se poblaron de fortificaciones
fronterizas entre el Reino de Portugal y la Galicia perteneciente
al Reino de León, la permeabilidad de comerciantes, peregrinos
y artesanos fue muy grande.
Como consecuencia de ello, la pertenencia del norte de Portugal
-a nivel diocesano y monástico- a la catedral de Tuy
justificará la influencia de la catedral románica
tudense sobre el románico del norte de Portugal.
Arquitectura
La del Monasterio de Sanfins de Friestas es una de las iglesias románicas más importantes de Portugal. Son varios los principales méritos que ofrece. Por un lado, se ha conservado casi intacta en sus estructuras y formas medievales. Por otro lado, cuenta con un gran repertorio escultórico figurado, presente especialmente en la cabecera y en los canecillos de las cornisas.
Otro aspecto que confiere atractivo a Sanfins de Friestas es el lugar en que se ubica. Se trata de un espacio rural al que se llega por carreteras locales estrechas y tortuosas, siendo el entorno boscoso y solitario.
Por último, diremos que se han conservado algunas de las dependencias monásticas, aunque no las originales románicas, sino de los siglos XV en adelante, como parte del claustro ubicado al lado norte.
Debió ser construida entre una fecha indeterminada de la segunda mitad del siglo XII y el año de 1221. El material constructivo es roca granítica cortada en sillares.
Estando orientada canónicamente, el templo posee una sola nave que se une a una cabecera constituida por presbiterio rectangular y ábside semicircular. Como marcan los cánones románicos, el ábside es más estrecho que el presbiterio y éste es también más pequeño que la nave. En Sanfins de Friestas este escalonamiento de altura y volúmenes resulta muy acusado.
Exterior
El ábside tiene cuatro columnas entregas que lo articulan verticalmente en cinco calles. En las tres centrales hay un ventanal tipo portada en cada una. También los muros presbiteriales tienen un ventanal semejante.
La colección de capiteles y canecillos de la cabecera nos muestra un rico repertorio de grandes relieves donde los protagonistas son las figuras de personas y animales, especialmente cabras, vacas y águilas con las alas cruzadas.
Esta exhuberancia ornamental de la cabecera decae radicalmente en la nave que muestra una apariencia mucho más austera como se comprueba en las tres puertas de ingreso.
Puertas
Sanfins de Friestas tiene tres puertas en los muros meridional, septentrional y occidental. Son bastante sencillas pues se limitan a dos o tres arquivoltas con tímpanos lisos o de escasa decoración sobre mochetas.
La puerta norte tiene dos arquivoltas que cobijan un tímpano liso soportado por dos mochetas. Tiene también una pareja de columnas cuyos capiteles presentan cestas muy meteorizadas y de difícil identificación.
La puerta meridional es aún más modesta pues no cuenta con columnas pero repite el tímpano sobre las mochetas con las cabezas de leones como simbolización de los protectores del ámbito sagrado.
En la puerta occidental, el tímpano muestra una serpiente y motivos geométricos apenas incisos superficialmente.
En el imafronte donde se abre esta puerta hay una evidente diferencia de color en los sillares que nos habla de la existencia de un antiguo porche o nártex, hoy desaparecido por las obras de restauración finalizadas en 1938.
Existieron dos sillares grabados con la siguiente inscripción:
I(N) : ERA M CC : L : IX
A esta fecha (ERA de 1259, año de 1221) pudo corresponder la construcción de este nártex.
Interior
En la actualidad, el templo se encuentra completamente desnudo. No quedan ni los bancos de la iglesia. Sólo apreciamos la arquitectura en estado puro con su especial armonía.
No obstante, aunque solemos apreciar la limpieza y austeridad de la piedra románica, el aspecto que debieron tener éste y todos lo templos románicos (menos los del Císter) sería completamente distinto, repletos del color de las pinturas murales, las telas, los antipendios de los altares, las imágenes, la orfebrería del ajuar litúrgico, etc.
Nave y cabecera se comunican mediante un arco triunfal de medio punto doblado sobre dos columnas entregas. En una de ellas el capitel es zoomorfo con la cabeza de un bóvido entre leones.
La bóveda del presbiterio es de medio cañón
y el arco de embocadura entre el presbiterio y el ábside
vuelve a tener un arco sobre dos semicolumnas. El ábside
tiene bóveda de horno.
Por su parte, la nave está cubierta por techumbre de
madera.