Guía de la iglesia de Aínsa, Huesca
Introducción
Aínsa es la capital de la histórica comarca oscense del Sobrarbe. El caserío del casco antiguo ubicado sobre un cerro de esta villa medieval es una delicia, lo que le ha valido el mérito para ser declarada Conjunto Histórico Artístico.
Una antigua tradición remonta el origen de Aínsa al año 724, fecha en la que Garcí Ximénez vencería a un ejército musulmán tras aparecer una cruz de fuego sobre una encina.
El castillo, del siglo XI, formó parte de la línea de defensa de los territorios cristianos y fue el germen del nacimiento de la villa, que durante la Edad Media se amuralló.
Introducción a la iglesia de Santa María de Aínsa
La iglesia de Santa María la Aínsa es, junto a la Plaza Mayor, el emblema de esta bella población oscense.
Es un edificio de un románico tardío muy sobrio a la par que monumental. Sabemos que fue consagrado en el año 1181.
Dependió de la diócesis de Huesca - Jaca y su condición se elevó a la categoría de colegiata, convirtiéndose en cabeza de todos los templos del Sobrarbe.
La iglesia consta de una nave, dos capillas laterales a modo de transepto y un ábside de planta semicircular. Bajo dicha cabecera se construyó una cripta.
Lo más sobresaliente es la torre campanario que por su altura gobierna las vistas de la localidad. Al costado norte también encontramos un bonito claustro medieval.
Exterior
La iglesia de Santa María de Aínsa se encuentra bastante agobiada de edificaciones por el flanco septentrional y también se oculta parte de la cabecera. Por contra, es el imafronte con la magnífica torre y el muro meridional lo que vemos sin aditamentos cuando, partiendo de la Plaza Mayor, tomamos la castiza calle de Escaleretas y su continuación que es la calle de Santa Cruz.
Cabecera
Puesto que se encuentra parcialmente tapada por otros edificios, sólo vemos parte del ábside. No tiene columnas ni impostas y seguramente perdió los canecillos en un momento posterior a su construcción. En el centro sólo hay un ventanal de arco dovelado de aristas vivas. Más abajo encontramos una aspillera que se corresponde con la cripta o iglesia inferior.
Puertas
Tiene dos puertas, una bajo la torre-pórtico de la que nos ocuparemos en breve y otra en el muro meridional que es la más monumental, aunque en la actualidad se accede al interior por la primera.
La portada sur se abre en un grueso arimez que llega hasta el alero de la fachada con su correspondiente tejaroz sostenido por canecillos. Consta de cinco arquivoltas completamente planas, de aristas vivas.
Los apoyos son cuatro parejas de columnas con basas que parecen capiteles invertidos. Los genuinos capiteles muestran relieves esquemáticos y de estilo rudo con elementos geométricos poco evidentes como decoración.
Dos de los capiteles y una basa cuentan con sendas inscripciones: grandes letras invertidas cuyo significado se desconoce.
Encima de la clave, en un sillar rehundido, encontraremos un crismón de la modalidad que se dice trinitaria. Se ha dicho que tanto este crismón como los capiteles con letras talladas podrían provenir de otra iglesia románica de Aínsa, la de San Salvador.
Ventanales
La iglesia de Santa María de Aínsa cuenta con dos vanos de iluminación del interior. Son muy parecidos: ajimeces con mainel central, muy rehundidos con respecto a la superficie mural exterior. Uno se ubica en el hastial occidental pero muy descentrado hacia el sur. El otro se abre en el muro meridional, al este de la puerta románica.
Torre campanario
La torre campanario es lo más valioso de este templo de Aínsa. Su altura y armonía la convirtió en modelo para otras torres de las iglesias de la comarca del Sobrarbe. Cuenta con la originalidad de ser una torre pórtico que se abre en su cuerpo inferior por arcos que permiten el acceso al interior por una de las puertas mencionadas.
Ubicada en la esquina noroeste de la iglesia, se asciende por una estrechísima escalera intramuros. Tiene este campanario treinta metros de altura y cinco cuerpos interiores que no se manifiestan al exterior. Cada cara del cuerpo de campanas tiene parejas de troneras de arco de medio punto sin decorar. Un cuerpo superior se abre por sus cuatro costados mediante un gran vano rodeado de arquivoltas y columnas, de similar factura a la puerta sur de la iglesia.
El remate superior es una cúpula con cuatro nervios (ocho segmentos) coincidentes en la clave. Dicha cúpula se yergue sobre cuatro trompas.
En el costado meridional se abre un ventanal ajimezado de hechuras más o menos similares a las dos descritas para la iglesia.
Claustro
Se accede desde una puerta en el muro norte. Es muy pintoresco por su irregularidad, al ser un cuadrilátero completamente irregular (trapezoidal). Las pandas se abren al patio mediante arcos de medio punto y apuntados.
Por su parte, las bóvedas también alternan medio cañón apuntado y crucería. Una curiosidad es que una de estas bóvedas de crucería es sexpartita.
Una de las panorámicas más sugerentes de quien visita la iglesia de Santa María de Aínsa es el monumental campanario irguiéndose por encima de las arquerías de este claustro.
Interior
La iglesia
Accedemos al interior por una puerta bajo la torre pórtico. Tras ella, escaleras que conducen hasta los pies del templo.
La única nave es muy amplia y se aboveda con medio cañón del siglo XVI. La cabecera tiene presbiterio rectangular con bóveda de medio cañón y ábside de cuarto de esfera aunque con un leve apuntamiento. En los muros no hay columnas, sólo responsiones para arcos fajones que en la actualidad no existen.
En el altar hay incrustado un crismón trinitario y en el lado norte del hemiciclo del ábside tenemos una imagen de la Virgen como Trono de Sabiduría del siglo XIII, procedente de la abandonada aldea de Tricas.
En la esquina suroeste de la nave hay una pila de bautismal de enorme sobriedad.
La cripta
Por dos escaleras de la iglesia superior se desciende a la inferior o cripta que fue destruida en la Guerra Civil. Décadas más tarde se recompuso con los materiales que habían podido ser recuperados, incluyendo algunas columnas, si bien hay otras modernas con su correspondiente letra "R" para no ser confundidas con las originales. Los arcos se rehicieron con ladrillos.
De planta semicircular como el ábside superior, está compuesta por doce espacios (la mayoría cuadrados) cubiertos por bóvedas de arista. Los apoyos son las citadas columnas, algunas exentas y otras adosadas a los muros.
Tanto los capiteles originales como los repuestos son de gran sencillez, como lo es toda la iglesia en su conjunto.