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Guía del Románico Mudéjar de Cuéllar y sus Tierras

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Introducción

Articulación mural típica del mudéjar de CuéllarEl sector noroeste de la provincia de Segovia, con Cuéllar y Coca a la cabeza, cuenta con numerosos edificios, tanto iglesias parroquiales, como ermitas aisladas en los campos, de estilo románico-mudéjar o románico de ladrillo.

Las características de estas iglesias mudéjares son parecidas a las de otros muchos ejemplares dispersos por La Moraña abulense o las cercanas llanuras de Salamanca y Valladolid, al formar parte de una gran comarca común denominada Tierra de Pinares. Sin embargo, aquí se aprecia una mayor integración entre la partes de calicanto y ladrillo con estructuras plenamente románicas como puertas, aleros con canecillos, etc.

El Románico mudéjar o Románico de ladrillo de Cuéllar

Cuéllar ha sido considerado uno de los tres principales focos españoles del románico de ladrillo, acompañando a Arévalo y Sahagún. Su influjo, por todo su alfoz, va a ser decisivo.

Fachada de San Andrés de CuéllarNo obstante, a diferencia de otras construcciones más norteñas de Castilla y León (Zamora, Valladolid, etc.), en que el empleo del ladrillo se dedica para toda la construcción, en el existente en esta comarca de Segovia, la presencia del calicanto va a ser cuantitativamente más importante que el ladrillo. Éste se suele reservar para las partes más nobles, en un paralelismo casi total con lo que sucede para la sillería en las comarcas orientales. En el mejor de los casos, el ladrillo es empleado para la cabecera con arcos ciegos, portadas de arquivoltas con alfiz y los ventanales.

Otro apartado a destacar de Cuéllar y su alfoz es la presencia de torres de armoniosa geometría.

La importancia de las ruinas

Las construcciones arruinadas son especialmente numerosas en este itinerario. La causa segura es la relativa fragilidad del material constructivo de estos antiguos templos, calicanto fundamentalmente, y sólo algunas partes de ladrillo. Dispersos sus restos por todas partes, en cerros, colinas y valles, se desmoronan inexorablemente.

Aunque el número de templos o restos de esta zona llega casi alcanza la cincuentena, muchos de ellos -como ya hemos apuntado- semiarruinados al construirse en materiales blandos como calicanto y ladrillo.

Románico de ladrillo en Cuéllar y sus Tierras

Románico en Cuéllar: iglesia de l SalvadorHemos elegido la iglesia y monumentos del conjunto monumental de Cuéllar: San Esteban, San Martín, San Andrés, Santa María de la Cuesta, etc.

Además, otras iglesias y ermitas de localidades cercanas son también de nuestro interés como San Baudelio de Samboal, San Juan y Santa María de Aguilafuente, Santa María de Fuentepelayo, San Pedro de Tolocirio, San Bartolomé de Montuenga, San Nicolás de Nieva, Santa María de Melque de Cercos, Rapariegos, la Ermita del Santo Cristo de la Moralejilla, la Asunción de Migueláñez y San Nicolás de Coca.

San Esteban de Cuéllar

Iglesia de finales del siglo XII o comienzos del XIII de tres naves, muy estrechas las laterales, torre, portada meridional con numerosas arquivoltas de ladrillo de medio punto y cabecera con ábside central de gran monumentalidad.

El citado ábside es considerado como uno de los más sobresalientes del mudéjar español, gracias a su tamaño y al original juego de arquerías ciegas inferiores y recuadros de diferentes formas y disposiciones de la parte superior.

San Andrés de Cuéllar

Posiblemente la iglesia de San Andrés esté construida a comienzos del siglo XIII, siendo un perfecto ejemplo de templo románico mudéjar de tres naves rematadas por tres ábsides decorados con arquerías y recuadros murales de ladrillo.

Muro lateral de San AndrésSus dos portadas son, sin embargo, de piedra, imitando el modelo normal de cualquier otra iglesia segoviana, con arquivoltas sobre columnas.

Lo que hace especial a esta iglesia es su fachada occidental perfectamente conservada y radiante al atardecer, con arquerías de ladrillo ojivales.

En cuanto al interior, notabilísima es su cabecera de tres ábsides donde los muros enfoscados de blanco contrastan con las arquerías y frisos de rojo ladrillo.

San Martín de Cuéllar

San Martín de Cuéllar es una buena iglesia mudéjar fechable, como otras, en el siglo XII o XIII, declarada monumento artístico en 1931.

El templo permaneció como ruina hasta una reciente restauración que además de frenar su inminente ruina ha permitido su reutilización para actividades culturales, para lo cual se ha abovedado con una cubierta transparente. Aplaudimos este tipo de solución para construcciones arruinadas o sin culto.

Para acceder a ella basta con tomar dirección al castillo.
Interior del ábsideComo es costumbre en el mudéjar de la provincia, el ladrillo no se emplea para todo el conjunto, sino para la cabecera y las portadas, siendo el resto de mampostería y sillarejo.

El interior, como consecuencia de las restauraciones presenta un inmejorable aspecto. Disponía de tres naves de cinco tramos rematadas en tres ábside de tambor. La planta es irregular siendo la nave de la Epístola más larga. Los arcos formeros doblados y recuadrados por alfiz gravitan sobre pilares compuestos. La cabecera sobresale por los arcos triunfales de acceso a las capillas y por los arcos ciegos presbiteriales.

San Martín de CuéllarYa por fuera, los tres ábsides se abren a la calle del Palacio que conduce al castillo, y son de perfecta estampa. El central más alto ancho y profundo que los absidiolos, al modo románico tradicional, tiene dos pisos de arquerías dobladas, y por encima un piso de recuadros superado por una banda de esquinillas, y rematado por cornisa de ladrillos volados. Los absidiolos son casi idénticos al anterior.

Además de la cabecera, exteriormente son reseñables la torre, de origen posterior y las tres portadas. Están situadas en los tres muros que delimitan el templo. La más sencilla es la del hastial a los pies, con doble rosca, la septentrional tiene cuatro arquivoltas, y la mejor es la meridional con seis roscas sobre impostas de nacela y recuadradas por alfiz.

Santa María de la Cuesta de Cuéllar

Santa Marina de la Cuesta: cabecera y torre campanarioSituada en lo alto de una empinada cuesta, que de ahí su nombre, el templo de Santa María de la Cuesta de Cuéllar es una construcción algo heteróclita, como consecuencia de la mezcla de materiales y volúmenes, con predominancia del calicanto sobre el ladrillo y sillar. Destaca su cabecera lisa de calicanto con tres ventanales y canecillos historiados, que difiere de la estética común de ladrillo de las iglesias cuellaranas.

La nave, transformada tiene calicanto y ladrillo, está protegida por un porche septentrional con dos arcos de ladrillo de origen románico.

El campanario es el más imponente de Cuéllar, más por su altivez y ubicación que por su belleza. Esta construido con calicanto y ladrillo fundamentalmente y llama la atención su lisura, sólo interrumpida por sus escasos vanos. En cada cara hay dos grandes huecos de medio punto superpuestos y por encima una pareja de arcos geminados separados por un mainel.

Ha sido declarado Monumento Histórico Artístico.

Palacio de Don Pedro I el Cruel. Cuéllar

Declarado monumento histórico artístico en 1974, no ha disfrutado de las notables restauraciones de otros monumentos cuellaranos, por ser propiedad particular.

A pesar de ser uno de los escasísimos ejemplos de arte románico civil, se encuentra en un estado lamentable de abandono.
Palacio de Don Pedro I el Cruel. Cuéllar: puertaSituado en el núcleo antiguo de Cuéllar, junto a la Plaza Mayor y la Plaza del Mercado del Pan.

Construido en el XIII muestra un claro carácter defensivo con la gran torre y fuertes muros de tapial, mampostería y sillar para las partes más nobles. El cuerpo de habitaciones tiene tres pisos La torre es de cuatro pisos aunque probablemente fuera más alta. La portada muy maltratada tiene tres arquivoltas dos lisas y una de baquetón, sobre una pareja de columnas. La fachada tiene cuatro ventanas entre el cuerpo del palacio y la torre. Son dobles, de medio punto muy peraltado, geminadas con mainel compuesto por columna de capitel vegetal.

Otros monumentos del estilo en Cuéllar

La riqueza monumental cuellarana no termina con los ejemplos señeros citados, sino que abundan otros muchos que vamos a citar de forma más breve.

Una feliz restauración ha salvado del olvido y la ruina lo que quedaba de la iglesia de Santiago, que había sido invadida por viviendas particulares. La cabecera es lo mejor conservado y presenta al exterior, las clásicas bandas horizontales de arquerías de ladrillo. Más interesante es el interior, por su doble piso de arquerías ciegas de precioso aspecto.

Iglesia de El Salvador de Cuéllar: cabecera reforzada por arbotantesLa antigua parroquia del arrabal de El Salvador conserva su cabecera de arquerías ciegas de ladrillo, la más pintoresca de las existentes en la ciudad, gracias a los arbotantes que hubieron de construirse para evitar su desplome, como consecuencia de las modificaciones de su estructura que provocaron un desajuste de empujes y contrarrestos. La torre de sillería y mampostería parece tardía y tiene tres cuerpos con algunos vanos ya apuntados.

La torre desmochada de Santa Marina, es lo único que queda de su demolida iglesia, que ya describiera José María Cuadrado, como una magnífica construcción de tres naves, de estructura y cubrición similar a la de San Esteban, y galería porticada adosada en el costado meridional.

Es de propiedad particular y su estado es bastante mejorable. Tiene sobre el cuerpo inferior ciego, otros dos más con pareja de arcos doblado y ciegos. Por encima existiría un cuerpo de campanas, también desaparecido.

Santa Marina de Cuéllar: torre campanarioTambién de propiedad particular y convertida en vivienda, es la cabecera de la iglesia de la Santísima Trinidad. La decoración exterior del ábside consta de dos pisos de arcos doblados y ciegos, como es habitual, superados por un piso de recuadros, con un arquillo de medio punto cada uno en su interior. Los muros del presbiterio llevan dos pisos de esbeltas arquerías.

La iglesia de San Pedro de Cuéllar, de origen muy antiguo, se encuentra muy transformada, especialmente por la hipertrofiada cabecera del siglo XV. Sin embargo, muestra algunos recuerdos del ejemplar románico, como dos puertas románicas de de piedra, en los costados sur y norte. Hoy este antiguo templo se ha convertido en un bar café.

En la parroquial de San Miguel, de estilo gótico final, son visibles los restos del pórtico de ladrillo que hubo adosado al costado del mediodía. Se trata de dos arcos de tres arquivoltas separados por alfiz.

Ermita del Santo Cristo de San Mamés. Campo de Cuéllar

El pintoresquismo de las iglesias de rojo ladrillo perdidas entre los inmensos campos de labor, tiene un buen ejemplo en esta curiosa ermita del Santo Cristo de San Mamés de Campo de Cuéllar.

Ermita del Santo Cristo de San Mamés. Campo de CuéllarSólo queda la cabecera de ladrillo, de esta más que probable parroquial de un asentamiento despoblado. Actualmente es utilizada como ermita, para lo cual la cabecera ha sido cerrada con piedra a la altura del arco triunfal. Éste tiene tres roscas apuntadas y da paso a un tramo presbiterial dividido por un arco fajón doblado y también apuntado, con arquerías ciegas apuntadas, y ábside en hemiciclo encalado.

Exteriormente recuerda la disposición de elementos de las iglesias de Cuéllar, es decir, dos pisos de arquerías ciegas, más otro superior de recuadros. Motivo original es el alfiz que arranca en el tramo recto desde el zócalo y en el ábside desde el primer piso. La estética del alero es muy cuidada. A modo de canecillos tres ladrillos volados soportan el alero, y por debajo un friso de ladrillos en disposición normal unos y en sardinel otros forman una especie de cadena.

Samboal

Iglesia mudéjar de Samboal, SegoviaSamboal es una pequeña localidad segoviana ubicada a una veintena de kilómetros al suroeste de Cuéllar.

La calidad, perfección y belleza de su iglesia parroquial de San Baudelio se atribuye a que perteneció a un monasterio benedictino en el siglo XII.

De gran efecto estético es el conjunto formado por su cabecera con tramo presbiterial recto y ábside. Todo ello decorado con dos y tres pisos de arquerías murales respectivamente.

Notable es su torre campanario, toda ello de ladrillo, dividida en pisos con huecos de campanas de medio punto y el añadido de frisos de esquinillas.

En el interior, este juego de arquerías es aún más impactante y demuestra la calidad de su fábrica.

Coca. San Nicolás

De la antigua ciudad de Coca y su rico patrimonio nos interesa especialmente el campanario de la desaparecida iglesia de San Nicolás, de aspecto un tanto extraño al haberse construido plenamente en mampostería y disponer de una pilastra en el centro de cada cara. Dispone de pisos superpuestos de arcos rítmicamente situados.

Más información de Coca, Segovia

Tolocirio. San Pedro

Situada junto a la N-601, en medio de una gran llanura, surge la monumental cabecera de la parroquial de Tolocirio. A simple vista más parece la torre de una fortaleza que la capilla de un templo.
La citada cabecera es de planta hexagonal y considerable altura y su fábrica es de mampostería con bandas de ladrillo. Una saetera estrecha situada en su centro es el único vano abierto.
La cabecera de Tolocirio sorprende pues se sale de las pautas normales de edificación románico-mudéjar. Sin embargo, la razón para su construcción obedece a la falta de atalayas y refugios naturales en estas planicies que obligó a levantar templos-castillo, para la doble función de vigilancia y protección.

Rapariegos. Ermita del Santo Cristo de la Moralejilla

La ermita del Santo Cristo de la Moralejilla es una construcción muy conocida en toda la comarca, quizás por estar situada en una inagotable llanura rodeada de campos de labor. Ha sido declarada Monumento Histórico Artístico.

Rapariegos. Ermita del Santo Cristo de la MoralejillaTiene tres naves, algo nada habitual en esta zona, no correctamente alineada con la cabecera de tres ábsides semicirculares. A su vez, el ábside central está desviado ligeramente hacia el noreste y aún más lo está el ventanal que se abre en su muro.

La cabecera probablemente estaría articulada a la manera clásica, con impostas, columnas y ventanales, pero destrozos posteriores apenas han respetado nada.
Se abren dos puertas de ladrillo en el hastial de los pies y el muro sur, ambas de cuatro arquivoltas de ladrillo, encuadradas por alfiz. La sensación de irregularidad que transmite exteriormente se repite al entrar en su interior.

Montuenga. Iglesia de San Bartolomé

Iglesia de Montuenga, SegoviaLa restaurada parroquial de Montuenga es un caso excepcional y de máxima originalidad entre todas los edificios segovianos y aún de todo el románico de ladrillo en España.
La decisión de construir el cimborrio sobre la cabecera, hecho nada corriente, causo la edificación de ésta bajo unas pautas completamente novedosas, y que no se repite en ningún otro caso conocido.

En su conjunto, el templo es de una nave y ábside ultrasemicircular, construidos con calicanto y verdugadas de ladrillo la primera y ladrillo el segundo. Conserva dos portadas apuntadas de ladrillo. La meridional consta de tres arquivoltas, frisos de esquinillas y alfiz, mientras la septentrional sólo dos. El ábside, que arranca en zócalo de mampostería, está dividido en quince paños por una arquería ciega, de esbeltas proporciones y muy original con respecto a la articulación de las cabeceras en esta zona.

Montuenga. Iglesia de San Miguel: ábsideEl cimborrio, que originalmente cabalgaba sobre la cabecera, fue convertida en torre-campanario en la restauración de 1981.
El interior de la cabecera es lo que confiere a este templo su singularidad. Dispone de tres espacios semicirculares abiertos mediante arco apuntado, que junto al que se abre a la nave, forman un cuadrilátero cubierto por cúpula sobre pechinas. Exteriormente, esta cúpula se transformaba, antes de la restauración, en el cimborrio citado.

Es aventurado explicar esta curiosa estructura, pero no sería descabellado buscar un simbolismo por el cual la cúpula (que representa la bóveda celestial) se asienta sobre tres capillas con eje perpendicular (Trinidad).

Melque de Cercos. Antigua parroquial de Santa María

Melque de Cercos. Antigua parroquial de Santa MaríaLas reformas que sufrió en el siglo XVII la iglesia vieja de Santa María de Melque, que destruyeron el ábside original, junto al desplome de parte de la nave y la cubierta en 1980, han desfigurado esta notable iglesia de calicanto y ladrillo.

Aún permanecen en buen estado la fachada sur, con entrada de tres arquivoltas de ladrillo, enmarcada con alfiz, y los muros del presbiterio con doble piso de arquerías ciegas de ladrillo.

Nieva. San Esteban

La iglesia de San Esteban de nieva es una de las mejores iglesias románicas del oeste de la provincia de Segovia. Conserva su cabecera, su gran torre y una espectacular galería porticada hecha a base de ladrillos sobre columnas de piedra.

Más información de Nieva, Segovia

Migueláñez. Nuestra Señora de la Asunción

Torre de la iglesia de MigueláñezLa Parroquial de Migueláñez presume de poseer una de las más portentosas torres del románico de ladrillo segovianas.
Esta situada en el costado septentrional y tiene planta cuadrada, asciende hasta gran altura mediante muros de lajas de pizarra y cadenas de ladrillo. Se divide en cuatro cuerpos mediante impostas: el primero no tiene aberturas, el segundo poseía un ventanal de arco doblado de medio punto, en cada costado, pero hoy todos se encuentran cegados, los dos cuerpos superiores son los más vistosos, con dos y tres vanos respectivamente.

Fuentepelayo. Santa María la Mayor

Esta iglesia conserva la cabecera románica de calicanto constituida por el ábside y el presbiterio, con tres ventanales en el primero. En la actualidad no hay corona de canecillos. También quedan algunas partes cegadas del pórtico románico de ladrillo que había en el flanco sur.

En el interior podemos ver los ventanales de medio punto y los capiteles del arco triunfal con figuras e aves y personajes..

Más información de Fuentepelayo, Segovia

Aguilafuente

San Juan de Aguilafuente: fachada sur y campanarioAguilafuente es una villa situada a unos treinta kilómetros al sureste de Cuéllar.

Dos son sus monumentos que presentas estructuras del románico mudéjar: la iglesia parroquial de Santa María, donde destacan sus dos ábsides su torre campanario y la vecina iglesia de San Juan, convertida en museo. En ella se conserva su estructura, sus puertas de ladrillo y un campanario plenamente románico.

 

 

 

 

 


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